viernes, 6 de marzo de 2009

Diario de destrucción vol.3

Este es un mensaje de desesperanza.

El ser humano fue capaz de aparecer de una casualidad que quizás no vuelva a repetirse. Se nos dio el premio más grande que existe, la existencia, y lo culminamos con el auto conocimiento de la propia existencia y el libre albedrío.
Fuimos capaces de crear nuestro mundo dentro de un mundo que ya existía, y cuando esto se nos quedó pequeño fuimos capaces de transformar el mundo existente para adaptarlo al mundo que creamos.
Fuimos tan listos que le dijimos al orden natural de las cosas como debía ordenarse y seguir su curso, fuimos tan listos que nos creímos por encima de la increíble coincidencia que nos dio la vida.
Lo tangible y lo sensible fueron pronto largamente superados por lo simulado y lo ficticio. Un árbol era tan solo un árbol, algo que vemos, que tocamos, que olemos, algo real que tiene su curso, que crece y vive. Un árbol es demasiado aburrido, así que creamos cosas que no vemos, que no olemos ni tocamos pero están ahí y nos afectan. Cosas que crecen por si mismas de manera desigual y sin ningún orden escrito, un ente con existencia propia que escapa a nuestro control a pesar de haber sido creado por nosotros.
De este modo el hombre es capaz de destruir otras casualidades como la vida animal o vegetal, contaminar océanos y el aire, destruir poco a poco el planeta de una manera tan rápida y efectiva que parece mentira que su mayor deseo sea vivir eternamente en el mismo planeta.
Por el contrario los verdaderos horrores del hombre son aquellos que, a pesar de haber sido creados por él mismo, no es capaz de controlar y le ahogan y le matan. Así vemos como la economía, sin ir más lejos, que fue creada para ordenar nuestras vidas con conceptos invisibles que afectan lo tangible escapa a nuestro control y no somos capaces de decirle: Basta, te creamos para ordenar nuestras vidas no para traer el caos a ellas.

¿Cómo no somos capaces de controlar algo que salió de nuestras manos y únicamente tiene sentido y existe por que lo queremos?

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